Minimalismo en el guardarropa: qué es y cómo aplicarlo - MARÍA SOTO

Minimalismo en el guardarropa: qué es y cómo aplicarlo

Estudios afirman que las mujeres utilizamos solo el 30% de lo que tenemos en el guardarropa. ¿Las razones? Poca claridad en el estilo personal, compras impulsivas y poco inteligentes, y cantidad. ¡Sí! La gran cantidad de prendas, muy por el contrario a la creencia popular, no hace que utilicemos más, sino ¡menos!

En este artículo te cuento de qué va el concepto de guardarropa minimalista, por qué es tan importante para aprovechar tus prendas y llevar un estilo de vida más sostenible y, lo mejor: cómo empezar a aplicar esta filosofía en tu guardarropa y en el de tus clientes. 

¿Qué es un guardarropa minimalista?

“Ni el estilo ni la elegancia se compran. Se aprenden, se tienen y se trabajan”.

Ya podemos desmitificar la idea de que el dinero trae bajo su ala el estilo y el glamour, ¿no? Tras más de 6 años de experiencia en el mundo de la imagen y la moda, puedo asegurarte que no hay dinero puesto en prendas que compre el estilo. En realidad, funciona de manera justamente inversa: una vez que somos capaces (de forma autónoma o con ayuda de un/a asesor/a de imagen) de reconocer el estilo, este se trasladará  a cada decisión de compra y vestimenta que hagamos. 

Decir que un guardarropa es minimalista o no no depende de su aspecto o su tamaño. La esencia de un guardarropa minimalista es que contenga las prendas que su dueña/o necesita para llevar adelante sus actividades y que utiliza con regularidad. 

La simplicidad y la funcionalidad son las dos características principales de un armario minimalista, con el fin de facilitar la creación de atuendos y combinaciones y optimizar las prendas y el espacio.

Solo hay una regla para crear un guardarropa minimalista: no tener exceso de ropa.

¿Cuáles son los principios de un guardarropa minimalista?

Como podrás imaginarte, el guardarropa minimalista responde a una filosofía muy amplia acerca de cómo elegimos vivir. 

El minimalismo es la tendencia a reducir a lo esencial, a despojar de elementos sobrantes. Tal como dijo el arquitecto Mies Van, para el minimalismo “menos es más”. 

Principios de un guardarropa minimalista

Nada en mal estado

¿Cuántos pantalones con agujeros o percudidos guardamos para “limpiar, estar en casa, usar de pijama”? ¡Ni que limpiáramos tanto!

Las prendas en mal estado o gastadas por su uso no tienen lugar en un guardarropa minimalista. Y además, vestirnos con ese tipo de prendas hace que le mostremos nuestra “peor versión” a aquellos con quienes compartimos la vida hogareña.

Comodidad por sobre todo

El suéter que te encanta pero que sentís que te asfixia cada vez que te lo ponés, la blusa que tiene lindo escote pero que se te cae y te hace transpirar mucho… ¡A por otro dueño/a!

Versatilidad

Las prendas versátiles son la clave para crear y mantener un guardarropa pequeño pero funcional, porque con poco te aseguras de poder crear atuendos para todo tipo de ocasiones. 

En ese sentido, los diseños limpios, los colores neutros y las telas y terminaciones de calidad son fundamentales.

Calidad

En este tipo de guardarropas ¡calidad por sobre cantidad! siempre. Al tener menos prendas, la calidad de ellas es fundamental, porque se utilizarán de forma mucho más frecuente. A mejor calidad, más duraderas, y por ende, más económicas en el largo plazo. 

Beneficios de un guardarropa minimalista

Sostenibilidad

Tener un guardarropa minimalista reduce muchísimo el impacto negativo que tenemos en el medio ambiente. Y si comenzás a comprar prendas de segunda mano o hechas por marcas sostenibles, ¡gol de media cancha!

Además, es sabido que la industria de la moda genera emisiones de carbono y contamina el agua dulce. Eliminar la compra innecesaria e invertir en prendas duraderas reduce la huella ambiental.

Compra inteligente

Vas a comprar menos porque el espacio será limitado, y vas a comprar mejor. Cada prenda que decidas incluir a tu guardarropa tendrá un fin específico, por lo que la compra impulsiva tendrá cada vez menos lugar en tu vida. 

Mayor confianza

Al reducir la cantidad de prendas que tenés, vas a quedarte con las que más te gustan y las que mejor te sientan, por lo que pasarás de vestirte la mayoría de los días con lo primero que encontrás a estar bien vestida, y eso ¿a quién no le sube la autoestima?

Ahorro de dinero

Tener un guardarropa minimalista no significa que nunca volverás a comprar, pero sí significa comprar menos, y como te dije antes, comprar mejor. Incluso si lo que comprás tiene un precio más elevado porque es sostenible o de mejor calidad vas a estar ahorrando dinero, porque no te imaginás la cantidad de cosas que compramos casi sin darnos cuenta y de lo que no tenemos ni registro. ¿Cuántas veces compraste algo solo porque te pareció un despropósito dejar pasar un 30% off?

Mayor creatividad para armar atuendos

El guardarropa tendrá menos, pero tendrá mejor. Los accesorios que dejes van ser clave para reversionar atuendos, y te aseguro que, con menos, vas a descubrir muchísimas más formas de hacer combinaciones y crear looks diferentes pero siempre fieles a tu estilo. 

Consejos para crear un guardarropa minimalista

Preguntas disparadoras para empezar a depurar un guardarropa

¿Qué quiero que mi ropa diga sobre mí? ¿Con qué telas y cortes me siento más cómoda/o? ¿Qué colores, patrones y accesorios resaltan mi verdadero yo y complementan mejor mi personalidad?

Convertir un guardarropa abultado de prendas en minimalista puede ser algo tedioso e incluso aterrador; pero el primer paso, como siempre, ¡es empezar!

Te aconsejo comenzar de a poco, sin desesperarte, de a una prenda por vez. 

Depurar el guardarropa

Un buen primer paso es hacer un inventario de todo lo que tiene el guardarropa actualmente. Luego, analizá prenda por prenda y decidí que prendas son para donar o vender y cuáles para conservar (y cuáles están en la cuerda floja, que siempre las hay).

Para decidir con qué quedarte, pensá en la frecuencia con la que se utiliza una prenda y si puede considerarse una prenda básica (neutra y sin estampado) o de complemento. Acá no queremos dejar las prendas que amás pero no usás porque nunca sabés cuándo o cómo, queremos practicidad. 

Listar lo que falta

Una vez hayas elegido las prendas que se quedan, pensá que prendas o accesorios pueden ser útiles para reversionar varias prendas y combinaciones, y cuáles terminarían nuevos looks, por ejemplo: un bléiser negro, una camisa blanca, una remera ajustada color nude. Esas son tus futuras compras, inteligentes y de calidad.
 

Cambiar la mentalidad

Una de las claves para tener éxito en crear y sostener un guardarropa minimalista es dejar de pensar de forma individual y comenzar a pensar en conjuntos completos. Puede que veas una prenda muy linda y única, pero que al pensar combinaciones no te encaja con más de una prenda… ¡No se compra!

Lo mismo con los básicos: un pantalón sastrero negro te salva cualquier evento espontáneo; tener sandalias abiertas y cerradas se adapta al clima del día.

¡Ojo! Los básicos son básicos, intentá no pecar de “despojada/o” y que te falten básicos. Sí, es posible que un guardarropa minimalista incluya prendas que no se utilizan con tanta regularidad, como un tapado de invierno; mientras tenga una función clara y versatilidad, puede quedarse.

Abrazar los favoritos

Una de las principales razones por las que la ropa no se desgasta es porque, simplemente, ¡no se usa! El objetivo de un guardarropa minimalista es sacar la ropa que no se utiliza, lo que significa que solo quedará lo que más nos gusta usar, ¡los favoritos! Si tenés demasiadas prendas, empezá por armar conjuntos con tus prendas favoritas (que sí uses) y a sumar prendas básicas para terminarlos.

En conclusión

Construir un guardarropa minimalista redefine la forma en que pensamos la compra y la forma de vestirnos. 

Todos podemos crear y mantener un guardarropa minimalista, independientemente del estilo de vida. Puede que, en un principio, una sensación de vacío y “no tengo nada” te invada… pero te aseguro que con el tiempo, llega la satisfacción. 

¡Te sorprenderá la cantidad de atuendos que se pueden armar con solo 20 prendas!

Personalmente, soy una gran aficionada del guardarropa minimalista porque creo que va perfecto con mi filosofía de Presencia Consciente, una forma ver y trabajar la imagen desde la conciencia y lo que verdaderamente somos, sentimos y queremos.

Si todavía no sabés de qué va la Presencia Consciente, podés leer cómo trabajo con la imagen haciendo clic acá

¡Hasta la próxima!

María